Cómo preparar platillos saludables rápidamente

Planear comidas saludables para la semana es genial, pero a veces la vida se interpone y los planes no pueden llevarse a cabo. Cuando eso pasa, el objetivo es simplemente poner comida en la mesa, ¡pero eso no significa tener que dejar de lado a la salud! El hacer comidas saludables no debe requerir mucho tiempo y planeación; de hecho, puede ser bastante sencillo.  Esta publicación te compartirá formas fáciles para hacer las comidas más saludables, sin que requieran mucho tiempo de preparación o planeación, ¡y en maneras que los/as niños/as van a seguir disfrutando!

Agrega frutas y vegetales/verduras a los platillos habituales, ¡pero no los escondas!

Foto de Pixabay por Jenny Shead

Añadir frutas y vegetales/verduras a un platillo favorito es una forma fácil de crear una comida con un toque nutritivo. Puede ser tan sencillo como mezclar algunos vegetales/verduras asadas o a las brasas (como champiñones o brócoli) en salsa marinara para espagueti; agregar frutas o vegetales/verduras a la masa para hacer panqueques de arcoíriso añadir frijoles negros o espinaca a las quesadillas.¡Siéntete libre de ser creativa! Sólo asegúrate de decirle a tus hijos/as que agregaste frutas o vegetales/verduras de alguna manera al platillo. Esto le ayudará a tu hijo/a a familiarizarse con algunos platillos y a establecer una clara comunicación sobre los alimentos, lo cual es importante para su relación y autonomía.

Usa como favoritos los alimentos que le gustan

¿A tu hijo/a le ENCANTAN los ejotes/judías verdes? ¿Se los come en cualquier ocasión? Entonces siéntete libre de servírselos todas las noches. Aunque es importante exponer a los/as niños/as a nuevas frutas y verduras/vegetales, también es importante que los/as niños/as estén familiarizados con los alimentos para ayudarlos a aumentar su consumo de frutas y verduras/vegetales. Si el único vegetal/verdura que come tu hijo/a son judías verdes/ejotes (o cualquier que sea su favorito), entonces esa puede ser la forma en que consumen sus vegetales/verduras la mayoría de los días. Sólo asegúrate de introducir nuevas frutas y vegetales/verduras en el camino, incluso si no les gustan la primera vez. Pueden necesitarse alrededor de 10 exposiciones a un nuevo alimento antes de que un/a niño/a lo acepte (a veces más), ¡entonces no te des por vencida de inmediato si probaron el brócoli la primera vez y dicen que lo odian! 

Mantén a la mano frutas y vegetales/verduras congelados y enlatados para añadirlas rápida y fácilmente a los platillos

Foto de Pixabay por Willfried Wende

Los alimentos congelados o enlatados tienden a tener mala fama, ¡pero no está justificado! Las frutas y vegetales/verduras congelados son igual de nutritivos que los vegetales/verduras frescos, y frecuentemente cuestan menos. En muchas ocasiones, estos productos congelados o enlatados pueden hacer un acompañamiento que requiere poco tiempo de preparación. ¡Únicamente debes estar a tenta a la cantidad de azúcar añadida o jarabe que puedan tener las frutas, e incluso los vegetales/verduras, enlatados! Las frutas y vegetales/verduras enlatados que contienen azúcar añadida o jarabe pueden aumentar considerablemente la cantidad de azúcar en una comida. Asegúrate de revisar la etiqueta para confirmar que el producto está enlatado en agua o jugo (no jarabe), ¡y que no contenga azúcares añadidos!

¡El agua es la mejor!

Quizá una de las formas más fáciles de hacer que una comida sea mas saludable es dejar las bebidas azucaradas como refrescos/sodas o jugos, y servir agua natural en su lugar. Si tienes un/a hijo/a que no está listo/a para deshacerse del jugo o refresco/soda, intenta llenar una vaso a la mitad con jugo, y la otra mitad con agua o agua con gas/mineral para reducir el azúcar. Para entender mejor cuáles bebidas son mejores para los/as niños/as, ¡revisa nuestra publicación sobre bebidas y nuestra serie en Instagram con la Dra. Caree, sobre cómo crear bebidas fáciles, saludables y deliciosas en casa!

Haz un intercambio

Dale giros nuevos y saludables a recetas favoritas para que la comida sea un poco más saludable. Por ejemplo, sirve un fruta con una cucharada de crema batida o yogurt como postre, en lugar de dulces; o prueba papas fritas hechas con camote y jícama horneados, en lugar de freírlos. Encontrar formas para convertir platillos favoritos a versiones saludables puede ayudar a que los/as niños/as aumenten su consumo de frutas y vegetales/verduras, mientras que al mismo tiempo disfrutan las comidas que les encantan.

Hacer las comidas saludables no tiene que ser una gran actividad, ¡y no tiene que ser caro! Esperamos que estas recomendaciones te sirvan. ¿Cuáles son tus formas favoritas de preparar una comida rápida y saludable? ¡Dinos en los comentarios!